martes, 4 de enero de 2011

Dos semanas de Tour por el Caribe Colombiano

Después de haber esperado por tantas infinitas semanas, días, horas, minutos y segundos las tan anheladas vacaciones, vengo yo a meterme en camisas de once varas. Claro que no todo era necesariamente una tortura, como si lo es soportar durante meses mediocridad y megalomanía en la mitad de la nada. Pero eso es harina de otro costal.

Fue sorpresivo para mi saber que me tendrían en cuenta para un contrato, pequeño eso sí, pero al menos un contrato que me permitiría viajar por la Costa Caribe, con la mayoría de los gastos pagos, para tomar unos datos de ciertos puntos de la geografía costeña.

No era la primera vez, de hecho ya había hecho dicho recorrido anteriormente, pero en aquel entonces estaba mucho más "pollo" mucho menos preparado para enfrentarme al mundo solo y no solo eso sino que mi jefe metió la pata varias veces con el calendario de visitas. Ahora yo sugerí todo practicamente. Empecé por Córdoba, luego Cartagena, Barranquilla, Riohacha, y finalmente Sta. Marta.

Aunque me quedó más bien poco tiempo para salir y conocer, al menos si pude recorrer dichos lúgares dentro de una perspectiva diferente. Estar sentado en un bus mirando por la ventana es definitivamente un gran placer para mi, y allí precisamente pude ver lo hermosa que es mi región. Desde las llanuras del San Jorge hasta los acantilados que crean las estribaciones de la Sierra Nevada cuando entra con fuerza en el océano. Conocí incluso nuevos amigos, con los que ya había hablado pero que no conocía en persona.

No puedo imaginar como tenemos tanto y tan poco a la vez. Todos los lugares que visité son enclaves de riqueza, generadores de empleo eso sí, pero al mismo tiempo generando un circulo cerrado donde solo entran unos pocos privilegiados, por tanto no parece tan loco eso que muchos dicen que están explotando nuestros recursos, sacándolos de nuestra tierra y ganan todos, en Bogotá, en Estados Unidos, en Europa y ¿Que hay del Caribe?

Tal vez un día me anime a hacer ese recorrido con mi propio esfuerzo, para poder tomar el pulso como debe ser, observando, registrando, escribiendo.

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